Como siempre, es un gusto saludarlas y saber de ustedes, Blissers. Me encantaría que aquí abajo en los comentarios me contaran sobre qué les gustaría que habláramos, o si alguno de estos posts les ha servido para cambiar algún aspecto de su vida. ¡Me encantará leerlas!
¿Alguna vez se han preguntado por qué las personas parecemos tener tantos problemas con todo, y en todos los escenarios? Aunque por supuesto que existen problemas serios que muchas podemos estar afrontando, existen muchos otros que abruman nuestras mentes y que, si lo pensamos objetiva y fríamente, no tienen relevancia y lo reconocemos porque estas mismas acciones causan tristeza que en realidad no duele y son completamente olvidables excepto por alguna que otra anécdota; no son problemas que vayan a quedarse por más de (máximo) un mes. Y, sin embargo, para nuestro día a día, ese momento de problema para nosotras significa toda nuestra realidad, todo nuestro mundo.
Estos pensamientos nacen de situaciones que podemos tener sin resolver en nuestra mente. El gran problema con ellos es que pueden hacernos llegar a suponer y pensar con base en algo de lo que no estamos seguras, y causar que sea precisamente la suposición la que convierta en realidad que no lleguemos a nuestros objetivos, que estemos tristes todo el día y que nos aislemos de las personas; es toda una bola de nieve que se va haciendo más y más grande.
Nuestros pensamientos son los que terminan teniendo gran influencia en nuestra vida. Incluso el afamado autor Joe Dispenza sostiene que él se despierta por la mañana y conscientemente crea su día tal como quiere que ocurra. Evitar decir “no puedo” te hace pensar en cómo sí se puede. Tener buenos pensamientos no es contrario a pensar “en frío” o “racional”, es solo siempre mirarlos desde otra perspectiva buscando siempre poder sentirte mejor y tener siempre mejores resultados.